El certamen de Miss Universo 2024, celebrado en la majestuosa Arena Ciudad de México, prometía ser una de las ediciones más memorables por su carácter icónico en tierras mexicanas. Sin embargo, la elección del Top 5 final generó una ola de indignación en redes sociales, donde miles de usuarios calificaron el resultado como un “robo descarado”.
En esta edición, el panel de jueces seleccionó a las representantes de Nigeria, México, Dinamarca, Tailandia y Venezuela como las cinco finalistas que disputarán la corona. Pero lejos de ser celebrado, el anuncio desató una tormenta de críticas en plataformas como Twitter, donde internautas expresaron su desacuerdo con los resultados.
“Robo descarado en favor de México y Tailandia”, reclaman internautas
Uno de los puntos más polémicos fue la inclusión de Fernanda Beltrán, representante de México, quien para muchos no ha mostrado un desempeño extraordinario. “Claramente la pusieron porque es la anfitriona, no había otra razón para que llegara al Top 5”, “esto es más un Miss Simpatía que un Miss Universo“, “México fue uno de los peores vestido ”la mexicana nunca tuvo fuerza para estar de finalista", se lee.
Por su parte, la elección de Opal Suchata Chuangsri, representante de Tailandia como finalista, también desató indignación. Muchos señalaron la coincidencia de que tanto el país anfitrión como el de la dueña del certamen hayan llegado a las instancias finales. “La dueña de Miss Universo es tailandesa y el certamen se organizó en México. Qué curioso que ambas pasaran sin tener mayor gracia. Que se note menos el robo”, fue uno de los comentarios más compartidos. Cabe destacar que Opal llegó con una poderosa historia como sobreviivente de cáncer.
Las grandes ausencias: ¿Quiénes merecían el Top 5?
La indignación no solo se centró en quienes pasaron, sino en las concursantes que quedaron fuera del Top 5, a pesar de ser favoritas del público y expertos en certámenes de belleza.
Entre las mayores sorpresas estuvo la eliminación de Tatiana Calmell, representante de Perú, quien había tenido un desempeño impecable durante las preliminares.
Desde su impactante traje típico en las preliminares hasta su desenvolvimiento en la pasarela de gala, Calmell era considerada por muchos como una apuesta segura para la corona. “Perú tenía todo para estar en el Top 5. Esto es un insulto al esfuerzo de Tatiana”, señaló un usuario indignado.
Otra ausencia muy discutida fue la de Miss Egipto, quien destacó por representar con orgullo a las personas con vitíligo. Su historia de superación y su carisma la convirtieron en una de las favoritas del público.
Asimismo, la exclusión de Miss Ecuador, quien desafió los estándares tradicionales de belleza al competir con una peluca debido a la enfermedad de Hashimoto, generó aún más críticas. “Ecuador y Egipto eran un ejemplo de diversidad y empoderamiento, pero prefirieron un show armado”, opinó un internauta.
Otra gran decepción fue Miss Colombia, quien nisiquiera fue considerada para pasar a las semifinales.
La presión hacia la organización también es evidente. Usuarios han exigido mayor transparencia en los procesos de selección y han solicitado que se incluyan votaciones más participativas para evitar este tipo de polémicas.
¿Qué sigue para Miss Universo?
Mientras el certamen se prepara para coronar a la nueva reina entre las cinco finalistas, el descontento del público podría marcar un antes y un después en la percepción del Miss Universo. Los organizadores tendrán que lidiar con el creciente escepticismo sobre la imparcialidad del concurso y responder a las críticas de quienes exigen un verdadero cambio en sus dinámicas.
“Miss Universo perdió su esencia este año. Este certamen cada vez es más irrelevante”, concluyó un internauta.