Los tiempos de las abuelas se terminaron hace muchos años, cuando el hombre era el que mandaba en casa, el que salía a trabajar, el que decidía absolutamente todo lo que tenía o no que hacer la mujer.
Para esos tiempos la mujer era solo para estar en casa, atender al marido y los hijos y no había momentos para ella porque la sociedad lo veía mal.
Los tiempos han cambiado, la mujer estudia, se hace profesional, trabaja, tiene familia, atiende el marido y tiene tiempo para ella, para divertirse, es dueña de su propio destino.
También están ese tipo de mujer que solo es ella y nadie más que ella, que los hombres son solo un objeto. Los extremos hacen daño y siempre debe existir un punto de equilibrio para poder estar bien.
Mi esposo es dueño de mi vida
Uno de los ejemplos que se ha hecho viral en las redes sociales sobre el papel de sumisión de la mujer es el caso de la modelo y presentadora brasileña, Andressa Urach, quien considera que el hombre es el dueño de su esposa.
Según el portal Upsocl, los movimientos feministas que han surgido en los distintos países se han desarrollado distintas luchas sobre la igualdad de género, ya sea en ámbitos sociales, económicos y laborales, por lo que el debate sobre estos temas ya ha llegado a todas las capas de la sociedad.
Andressa se pasó por alto todo y causó polémica por un mensaje que publicó recientemente en su Instagram, en donde dijo que “la mujer no tiene autoridad sobre su propio cuerpo, pero el marido sí”.
“Feministas, respeten mi decisión. ¡Oraré para que tengan un esposo maravilloso, como un hombre de Dios! Entonces les va a encantar ser sumisas”, continúo.
¿Autorización para se quien soy?
Obviamente en tiempos donde se lucha por la igualdad de género, las criticas le llovieron a esta modelo, incluso seguidores la acusaron de no estar bien de salud mental.
Tras subir unas fotos de su trabajo como modelo dejó en claro que su esposo la “apoya” y que él la “autorizó y aprobó” al momento de sacarse los retratos.
“Si mi esposo alguna vez me dice que deje de ser modelo, obedeceré, después de todo, él es un buen esposo, me ama, es fiel, un líder y proveedor aquí en casa”, agregó.
Algunas féminas le recomendaron revisarse y entender que se trabaja por uno mismo, no por otros y que su vida no depende de la decisión de un hombre sino de ella misma.