Melissa Sloan, una mujer de 45 años y que tiene gran parte de su cuerpo cubierto por tatuajes, se volvió viral hace unos días tras compartir un registro en TikTok que muestra su antes y después. Además, reveló que no puede conseguir trabajo debido a sus tatuajes y que incluso su Navidad está arruinada producto de cómo luce.
La historia
Según consigna Clarín, citando al Daily Star, la mujer no puede conseguir trabajo debido a los tatuajes, indicando que además la gente la mira raro en la calle.
Sin embargo, nada de esto detiene a Sloan, quien piensa seguir tatuando su cuerpo. “Me dejo llevar por la corriente, lo que me gusta me lo pongo en la cara. Me dejo llevar por la inspiración, me queda espacio y me lo pongo. Es gratis, lo hago yo misma, o lo hace mi novio, que fue entrenado para hacerlo, lleva años haciéndolo. Tenemos nuestra propia máquina y todo, eso mantiene el costo bajo”, expresó.
“Es caro ahora, ¿verdad? Mañana me hago la cruz, que costaría entre 60 y 70 dólares en un tatuador, pero ahora sólo me costará la tinta, que cuesta unos 10 dólares el frasco, y una aguja, que cuesta 10 dólares la caja, así que creo que me costará alrededor de un dólar”, afirmó.
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Sobre cómo reaccionan las personas ante ella, afirmó que “la gente me llama Melissa la loca, pero yo me siento Melissa, así es como soy. Si no les gusta, no tienen que mirarme, no me importa. Hay gente que juzga, te juzgan como sea. La gente me mira, te acostumbras”.
La mujer indicó que “no puedo conseguir un trabajo. No me aceptan. Pedí trabajo de limpieza de aseos donde vivo y no me aceptan por mis tatuajes”.
El nuevo problema que enfrenta la mujer más tatuada del mundo
Sloan señaló además que en la actualidad tiene un nuevo problema: afirmó que su Navidad está arruinada.
En ese sentido, indicó que nadie quiere compartir con ella debido a su aspecto, pese a que solamente quiere disfrutar de las fiestas de Navidad con la gente.
“Por lo que soy, no me invitan a las fiestas de Navidad. Quiero divertirme e ir a tomar una copa al pub, pero ni siquiera me dejan entrar”, concluyó la mujer.
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