“Estoy muy contenta”, aseguraba la princesa Leonor este jueves a todos los curiosos que se interesaron por cómo estaba viviendo su puesta a punto. Solamente tiene 48 horas adaptándose en Cádiz para lo que será su nueva aventura y vida en el buque escuela Juan Sebastián Elcano y la joven heredera ya superó el primer reto.
PUBLICIDAD
El insólito lapsus de la princesa Leonor
No obstante, no todo se trata de maniobras o instrucciones. Sin tiempo que perder, a primera hora de este viernes, 10 de enero, el grupo de guardamarinas se presentaba en las puertas del Ayuntamiento de la ciudad andaluza, de acuerdo con lo reseñado por Lecturas.
Ataviados con el uniforme de gala en color azul marino, conformado por una chaqueta entallada con doble botonadura dorada, camisa blanca, pantalón recto, guantes y sombrero bitono, Leonor, con una mirada fija, ocupaba la cuarta fila.
La princesa de Asturias rompe el protocolo militar
Aunque se trata del segundo año de formación militar luego de su exitoso paso por Zaragoza y ahora Marín, parece que la joven heredera todavía le cuesta adaptarse al férreo protocolo que dicta la Armada. En un momento dado, Leonor perdía su concentración en medio de la formación y a su salida del Ayuntamiento respondía a los gritos de “guapa” de los presentes, girando la cabeza para enviarles una sonrisa en modo de agradecimiento.
Se trata de un gesto con el que rompía la formación, tal y como es posible ver en las imágenes. Algo que está totalmente prohibido en el mundo militar.
Leonor está llamada a convertirse en mando supremo de las Fuerzas Armadas. Su aventura en el Juan Sebastián Elcano pondrá fin a su año de formación en el Ejército del Mar, el próximo mes de julio. Un mes después, la princesa de Asturias comenzará su formación en Murcia, específicamente en el Ejército de Aire.
