Las películas románticas siempre caen el cliché de la historia de amor con finales felices, pero en ese género hay una producción que fue muy aclamada y que la plataforma de Netflix la tiene en su catalogo, se trata de “Expiación, deseo y pecado”, con todo lo inesperado para brindarte una buena historia con giros inesperados.
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Protagonizada por la actriz que deslumbró a la critica, Saoirse Ronan, producción que le permitió su primera nominación al Oscar. También conocida por interpretar a una adolescente de espíritu libre en Lady Bird o desafiando las agitadas aguas del Atlántico en busca de una vida mejor en Brooklyn.
En la cinta “Expiación, deseo y pecado”, Ronan interpreta a Briony, una niña de 13 años en la Inglaterra de 1930 que es testigo de un crimen y acusa falsamente a Robbie Turner (James McAvoy), el hijo del ama de llaves de su familia, de cometerlo.
Una mentira que alteró la vida de todos
Robbie y la hermana de Briony, Cecilia (Keira Knightley), están enamorados, y la mentira de Briony descarrila cualquier esperanza de que su relación termine felizmente.
Según el resumen del portal Qué ver, la elección que hizo Briony cuando era niña altera la vida de los involucrados para siempre, y mientras se siente obligada a corregir sus errores, es su silencio el que deja un daño irreparable en un giro final que dejará temblando incluso a los espectadores más fuertes.
El vestido verde y su simbolismo
Para armar el vestuario de los personajes, el director de la película Joe Wright recurrió a Jacqueline Durran con quien había trabajado en la mítica película Orgullo y prejuicio, en el año 2000.
Las órdenes del director para el famoso vestido incluían tres criterios: ligereza, largo y tono de verde. Con la escena ambientada en el día más caluroso del verano, el atuendo tenía que ser revelador, delicado y sutil al mismo tiempo.
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El largo de la falda también fue importante para la escena en la que Cecilia y Robbie se encuentran en la biblioteca y comienzan su primer abrazo.
En cuanto a su color verde, simboliza tanto la interiorización de los sentimientos entre las dos protagonistas como los celos que siente Briony (Saoirse Ronan) quien sorprende a su hermana con el hombre del que está enamorada.