El caso de Sean “Diddy” Combs, en la cárcel por los cargos de abuso y tráfico sexual y crimen organizado, tiene a más de una celebridad en silencio y angustiada por asistir y avalar lo que sucedían en las famosas “Fiestas Blancas”. Pero el productor musical tenía una obsesión, la Familia Real Británica, específicamente con los príncipes William y Harry, que no cumplió.
Fue el publicista Rob Shuter, quien le dijo a la BBC que ser invitado a las fiestas del rapero era un “honor” para cualquier celebridad del momento.
El hombre que trabajó con el rapero entre 2002 y 2004, habló de la larga lista de invitados en los que destacaban celebridades como Justin Bieber, Jennifer Lopez, Mariah Carey, Paris Hilton, Ashton Kutcher, Leonardo Di Caprio, Chris Brown, Usher, Jay-Z, Beyoncé, entre muchos otros.
Aseguró en sus declaraciones a la BBC, recogidas por el diario La Tercera, que cuando Diddy “te guiñaba un ojo y te decía que entraras a la sección VIP, sabías que te esperaba una muy buena noche”.
Se consideraba “Rey”
Las fiestas era la forma como Puff Daddy se mantenía en el “centro” de la industria musical y exigía que le tomaran fotos para que todos supieran el estilo de vida que llevaba, imágenes que hoy son evidencia, no sólo de lo que sucedía dentro de las fiestas, sino de los involucrados en esta trama.
Destaca Shuter que Diddy estaba “obsesionado” con el poder y quería seguir siendo famoso a toda costa y tenía una “profunda fascinación” por la Familia Real británica.
Mientras trabajó para Diddy, recordó que le pidió más de 10 veces que llamara a los príncipes Harry y William para que asistieran a sus fiestas.
“Les ofrecía pagarles el viaje, alojamiento y su seguridad. Pero ninguno de los dos príncipes aceptó sus invitaciones”, enfatizó el expublicista.
Destaca Shuter que Sean Combs se consideraba “rey” y esa obsesión lo llevó en reiteradas oportunidades a insistir en las invitaciones a los príncipes y buscar formas de acceder a la Familia Real a como diera lugar, incluso en su departamento en Nueva York tenía enmarcadas las fotografías de Harry y William.
“Él se consideraba un rey, por lo que tiene mucho sentido que le hubiera gustado tener dos príncipes en su séquito”, dijo el publicista.
Nuevas denuncias de abuso sexual
Según los medios estadounidense ya son 100 las demandas en contra de Sean “Diddy” Combs y se espera que en las próximas horas se sumen muchas más. Esta semana 6 víctimas lo denunciaron, entre ellas una mujer que en el año 2000 apenas tenía 13 años.
Los denunciantes realizaron sus demandas bajo el anonimato y todos acusan a Combs de agresión sexual o violación en supuestos incidentes desde el año 2000 hasta 2022. People, accedió a ellas y dijo que se presentaron el domingo en el Distrito Sur de Nueva York.
La demandante, hoy en día tiene más de 30 años y señala que en la fiesta fue objeto de violación a manos de una “celebridad masculina no identificada”. Mientras, una mujer famosa que no identificó solo miraba antes que Combs la violara.