Nicole Kidman tuvo un aparente pequeño fallo en su atuendo casual para abordar un vuelo junto a sus hijas desde su natal Australia hasta su casa en Estados Unidos el pasado lunes.
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La estrella de 57 años de edad fue captada junto a sus herederas con Keith Urban, las adolescentes Sunday Rose y Faith Margaret, en el aeropuerto de Sídney el 30 de diciembre.
La familia pasó las Navidades en el país en Oceanía, pero querían recibir el nuevo año en su casa en Nashville, por lo que decidieron volar ese día para llegar a tiempo a la Nochevieja.
La actriz de Hollywood trató de pasar sin ser notada por la terminal con un atuendo elegante, pero cómodo. No obstante, un diminuto desperfecto se llevó todas las miradas.
El detalle en el último look de Nicole Kidman que se robó la atención
La protagonista de Las mujeres perfectas vistió una sofisticada blusa azul marino con detalles en blanco y unos pantalones de mezclilla azules clásicos de tiro alto para el viaje.
Kidman completó con un par de tenis blancos, un bolso de cuero negro de diseñador y uno rojo y negro para llevar su computadora portátil. Por último, remató con unas gafas oscuras.
En cuanto al beauty look, dejó sus rizos rubios al natural y lució un maquillaje minimalista que realzó su belleza natural. La famosa lució despampanante con sus hijas de 14 y 16 años.
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No obstante, mientras caminaba con brisa por el aeropuerto, la bragueta de sus jeans parecía estar baja, un detalle que no pasó desapercibido entre medios y usuarios en línea.
“A muchos de nosotros nos ha pasado, pero por suerte no teníamos cámaras apuntando a nuestra zona privada...”, escribió un internauta en solidaridad a la ganadora del Oscar.
“Simplemente se olvidó de cerrar el cierre de sus pantalones. Es algo que ocurre con frecuencia”, apuntó otro. “Un error común... Yo lo reviso unas 20 veces”, agregó un tercero.
“Así que se le rompió el cierre. Nos pasa a todos. Por eso llevaba un archivo enorme delante para taparlo. Supérenlo”, dijo un cuarto. Mientras, un quinto criticó a los paparazzi.
“¿No hemos tenido todos ese problema? ¿Cambió la vida? No. Inútil y patético. ¿Por qué alguien elegiría humillar públicamente a otra persona?”, cuestionó.
