De las comedias juveniles, alocadas y subidas de tono hay una lista larga en la plataforma de Netflix, pero hay una que se estrenó en 2013 y que aun tienes la oportunidad de ver. Se trata de “Una noche loca, o Noche de marcha” como se la conoce en algunos países.
La película que es una comedia juvenil tiene una duración de 93 minutos. Esta producción subida de tono cuenta con la actuación de Miles Teller, que comenzó con este género para después transformarse en un actor de películas “serias”.
La historia trata sobre la vida de Jeff Chang, un estudiante con un gran expediente académico, cumple 21 años y su amigo Miller está desesperado por conseguir que se agarre la borrachera de su vida para que todos puedan disfrutar de una última noche increíble antes de comenzar su vida de adultos.
Horas más tarde, Jeff se desmaya por la cantidad de alcohol ingerida y sus amigos no recuerdan dónde vive. El joven le tocaba presentar su examen para aspirar a la escuela de Medicina.
Buena y mala critica
La película ha tenido muy buena repercusión entre los críticos que han dejado buenas reseñas al respecto. Generalmente estas comedias alocadas suelen ser castigadas por los especialistas.
“Mucho mejor que la igualmente escabrosa ‘Project X’ (...) este himno a la irresponsabilidad juvenil aplica a su conjunto de gags la actitud correcta, entre lo crudo y lo rudo, para tener el efecto deseado en su público objetivo”, es el comentario por parte de Variety sobre esta comedia subida de tono de Netflix.
“Entretenida película de fiestas universitarias, pero está tan visto este género que ni sorprende, ni innova. Es un revuelto de todos los tópicos de este genero, tres amigos (el listo, el gracioso/tonto y el que se desmadra) que se van a graduar en la universidad y deciden salir de fiesta cuando no deberían y eso les llevará a meterse en múltiples líos y momentos graciosos durante toda la película. Lo hemos visto mil veces, pero eso no quiere decir que sea una basura, cumple con su función, nada más”, destaca el portal Tomatazos.